(OSV News) – Este mes de octubre, más de un millón de niños de todo el mundo están alzando sus voces en oración, ya que la organización pontificia Aid to the Church in Need (ACN) celebra el vigésimo aniversario de su campaña "Un millón de niños rezando el rosario". Lo que comenzó en 2005 como una pequeña reunión en Venezuela se ha convertido en un movimiento global que se extiende por todos los continentes.
El cardenal Mauro Piacenza, presidente internacional de ACN, describió la campaña como una respuesta a "un mundo herido por la división, los conflictos y el sufrimiento". Afirmó que el rosario "no es una práctica árida ni repetitiva, sino un camino suave y vigoroso que nos lleva al corazón del Evangelio".
Instó a las familias a invitar a los niños a rezar "para abrazar al mundo entero con esta corona de luz", y añadió: Recemos juntos para que se fortalezcan los lazos de la comunión eclesial, tanto afectivos como efectivos, y para que el Espíritu Santo despierte en los corazones de los jóvenes un sincero deseo de santidad".
La inspiración para la campaña proviene de una frase atribuida a San Padre Pío: "Cuando un millón de niños recen el rosario, el mundo cambiará". Esa visión cobró vida por primera vez en Caracas en 2005, cuando un grupo de niños se reunió en una capilla para rezar juntos.
La iniciativa ha crecido constantemente. En 2023, por primera vez, el número de participantes oficialmente registrados superó el millón. Ese hito se repitió en 2024, y los líderes de ACN creen que marca el comienzo de una "ola de oración" que se extiende a través de las zonas horarias y las culturas.
El apoyo a la iniciativa ha llegado de todo el mundo. En Pakistán, Zohaib Haroon, secretario de la Diócesis de Faisalabad, escribió: "Creemos sinceramente que la oración, especialmente el rosario, sigue siendo nuestra arma espiritual más poderosa para la paz, la unidad y la protección de vidas inocentes".
Dijo que se movilizarían escuelas, parroquias y centros catequéticos para sumarse a la iniciativa.
En la India, el obispo Theodore Mascarenhas, de Daltonganj, calificó la invitación a la oración de "profética y profundamente necesaria".
Desde el Amazonas, en Ecuador, el obispo Adalberto Jiménez, de Ubaba, dijo que su pueblo se reuniría "Desde nuestras selvas y ríos, nuestras escuelas y capillas, desde el corazón verde de la Amazonía ecuatoriana, nos unimos con amor filial a la Virgen María y con esperanza en el futuro del mundo, que ponemos en sus manos". El obispo cuenta con que al menos 2.500 niños y 7.000 adultos se unan a la iniciativa.
Los obispos africanos también subrayaron la urgente necesidad de orar. El obispo Leopoldo Ndakalako, de Menongue, Angola, describió la campaña como "una iniciativa magnífica, única y oportuna, especialmente en este momento de la historia".
El obispo Bruno Ateba, de Maroua-Mokolo, Camerún, advirtió que el terrorismo y el odio "el odio y la división están ganando terreno, y que el número de personas en dificultades aumenta constantemente. Nuestra ayuda es en nombre del Señor, que creó el cielo y la tierra".
Desde Asia, el padre Yakobus Warata, provincial redentorista en Indonesia, dijo que el evento es un recordatorio de que la acción cristiana debe estar arraigada en la oración.
"En una época marcada por la creciente violencia, la división y el sufrimiento, vuestras palabras son un recordatorio oportuno y poderoso de que nuestra respuesta debe basarse no solo en la acción, sino también en la oración profunda y unida", y añade que "estamos convencidos de que la inocente oración de los niños tiene un poder único para conmover el corazón de Dios y traer la paz a nuestro atribulado mundo", expresó.
En Sri Lanka, el padre Shelton Dias expresó su convicción con palabras aún más sencillas: "El poder del rosario puede cambiar el mundo. Nada puede superar el poder de la oración". El padre Anton Lässer, de ACN, se mostró de acuerdo: "La oración de los niños tiene un poder especial ante Dios, un poder que puede derribar muros, curar heridas y llevar la luz a la oscuridad", afirmó.
Este año, añadió, la campaña adquiere un significado adicional dentro del Jubileo de la Esperanza de la Iglesia. "El santo rosario es y será siempre un camino probado y fiable de esperanza en la paz, un camino que actualmente recorremos con gran fe, sobre todo en este Año Jubilar de la Esperanza de la Iglesia".
En 2025, la organización benéfica invita una vez más a las parroquias, escuelas, familias y movimientos católicos a rezar el rosario durante la primera semana de octubre, con especial énfasis en el 7 de octubre, fiesta de Nuestra Señora del Rosario. Cualquiera puede participar, pero se anima a los grupos a inscribirse en línea para que los organizadores puedan medir el alcance de la participación.
Para ayudar a las familias y a los catequistas, ACN ha preparado recursos en varios idiomas, incluyendo meditaciones, tarjetas de oración e ilustraciones a todo color diseñadas para los niños. Los materiales se pueden descargar gratuitamente desde la página web de la campaña, lo que permite a las comunidades de todo el mundo rezar juntas utilizando los mismos textos e imágenes.
Los organizadores subrayan que la campaña no se trata solo de números. Su objetivo más profundo es fomentar una cultura de oración entre los jóvenes y darles una herramienta que puedan llevar consigo durante toda la vida.
"Los niños también son protagonistas en la vida de fe", dijo el obispo Mascarenhas, "capaces de interceder poderosamente por la paz y la reconciliación".
El cardenal Piacenza se hizo eco de esta esperanza. "En una época en la que el silencio de la oración se ve demasiado a menudo ahogado por el ruido del mundo", dijo, "el rosario ofrece un oasis de contemplación".
Añadió que las voces de los niños elevadas en oración pueden ayudar a sanar divisiones e inspirar la unidad, no solo dentro de la Iglesia, sino también entre las naciones.
Katarzyna Szalajko escribe para OSV News desde Varsovia, Polonia.